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jueves, 4 de junio de 2015

Tomorrowland resultó ser más bien Refritoland

Cada año llegan numerosas superproducciones desde el otro lado del atlántico, tirando al norte, que resultan atractivas y que, generalmente al menos, aseguran un entretenimiento efectivo y sencillo, algo de lo que sabe mucho la factoría Disney. Ficharon a Brad Bird para hacer "Los increíbles", una de las mejores de Pixar, aunque no es que tenga ninguna que podamos decir que sea mala, y lo volvió a conseguir con "Ratatouille". Se ve que tras eso el hombre quiso lanzarse al largometraje con personajes de carne y hueso y empezó con la cuarta entrega de "Misión imposible", película que no he visto pero que intuyo que, muy probablemente, adolece de los mismos defectos que esta que hoy analizamos.
Cuando vemos animación, o al menos la más clásica, es suficiente con que haya una trama de fondo que se sostenga y mantenga el interés lo suficiente para que sea algo más que un entretenimiento vacío, en eso Bird, del que también he visto la gran "El gigante de hierro", sabe lo que se hace y puede que incluso esa misma fórmula funcionase en su incursión en el cine de acción junto a Tom Cruise pero en "Tomorrowland" hace que nos encontremos ante una historia que no nos cuenta prácticamente nada, que tarda en arrancar la vida y que, cuando lo hace, tampoco nos cuenta casi nada y lo poco que cuenta está tan manido, que el preciosista envoltorio no compensa el sabor agridulce que te deja ese bombón que no lo esperas y está relleno de licor —a mi es que no me gustan, los demás podéis usar otros símiles—, quedándote con la sensación de que Clooney es un reclamo y que volvemos a ver a Hugh Laurie haciendo de "House" estilo Disney.
Según avanza la película tienes la sensación de estar viendo una especie de extraño cóctel en el que caben "Terminator", "Flubber", "Doraemon y Nobita Holmes en el misterioso museo del futuro" —que casi es con la que más similitudes veo— y muchas referencias más que la alejan de casi cualquier atisbo de originalidad.
Además de eso y, repitiéndome un poco, Clooney y Laurie se ven muy poco motivados en sus papeles y las niñas no desentonan pero lo mismo podían haber estado en una película de ciencia ficción que en "Princesa por sorpresa", quizá la mejor del reparto sea la benjamina.
Estamos ante una cinta que tiene algún que otro momento, como en la tienda de cómics, pero que no se decide sobre si quiere ser para toda la familia o un proyecto con cierto tono adulto, que durando más de dos horas no nos cuenta prácticamente nada y en la que tuve casi todo el tiempo, con la banda sonora de Michael Giacchino, de estar escuchando piezas de Star Wars mientras observaba lo bien que quedaba la ciudad de las artes y las ciencias de Valencia en ese mundo futurista creado con más fuegos de artificio que con unos cimientos sólidos de verdad. Para rematarlo todo, trata de ser aleccionadora con un mensaje que llega tarde y explicado de manera un tanto atropellada, que encima me hizo recordar la infame "The happening" de Shyamalan.
Cine palomitero que en pantalla grande llega a ser mínimamente disfrutable, sobre todo en lo visual, pero que me deja claro que si Bird y Disney siguen por este camino estarán alimentando claramente al lobo malo.
Nota: 4


1 comentario:

  1. Hola Rudy!! Creo que Tomorrowland es recomendable para un fin de semana tranquilo de movies, a mi en lo particular me mantuvo entretenido, me dejó una buena experiencia visual por los escenarios que se mostraron. Saludos y muy bueno tu blog.

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