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lunes, 27 de abril de 2015

Un tranvía llamado deseo y un deseo que puede hacerte perder la cordura.

Era esta una de esas cintas que con certeza sabía que teníamos que ver en cuanto mi esposo me propuso una noche de clásicos. Creo que esta película no deja indiferente a nadie tras su visionado, es difícil describir todo lo que transmite el ambiente, el suburbio en el que se desarrolla la historia, con unos personajes que parecen todos tener dos lados contrapuestos. Considero que es una magistral adaptación de la obra homónima que Elia Kazan llevó a la pantalla bajo la supervisión de su creador Tenesse Williams.
Blanche interpretada por Vivien Leigh, es una mujer un tanto cursi, aunque con un oscuro pasado, que llega a Nueva Orleans para quedarse en casa de su hermana Stella/Kim Hunter y su cuñado Stanley/Marlon Brando, un hombre rudo que se pelea constantemente con su mujer y solo sabe reconciliarse con ella en la cama.
Sin duda es una película cuyo trasfondo es la pasión, la lujuria, la locura que difícilmente te puede dejar un buen sabor de boca, eso al menos me ha pasado a mí. A pesar de los enormes obstáculos que debido a la censura tuvieron que salvar, considero que Kazan consiguió transmitir todo aquello que era imprescindible para captar el espíritu de la historia, aunque bien es cierto que disfrutamos de la cinta original, he tenido ocasión de ver cuales fueron todas aquellas tomas que a causa de la llamada "Legión de la Decencia" fueron eliminadas. En realidad sus mentes eran bastante obtusas ya que no existe una gran diferencia pero ahí está el buen hacer de directores como Kazan que de algún modo supieron burlar la censura. Incluso algunas piezas musicales fueron cambiadas porque se consideraron demasiado carnales y sugerentes. Fue clasificada con la letra "B" esto es "ofensiva" pero al menos no la clasificaron con la letra "C" prohibida para los católicos con todo lo que ello conllevaría a nivel comercial.
Esta película parece casi querer plasmar la maldición bíblica del génesis "Tu deseo vehemente será por tu esposo y él te dominará" porque eso es lo que  parece ocurrirle a Stella, la pasión, el deseo por su esposo la lleva a perdonarle prácticamente todo, su desdén, su maltrato cuando él viene a ella llorando como un niño. Cuando Blanche le echa en cara a su hermana este hecho, Stella le contesta algo así como: "¿Acaso te has subido tú alguna vez en el tranvía del deseo?" Pues yo sí lo he hecho e invito a mi esposo a subirse a él.
Yo llevo subido en el tranvía del deseo desde que te conozco mi amor aunque en uno más agradable que el que nos proporcionó el viaje de anoche.
No sé cuántas escenas de las que vimos estaban en su día censuradas pero aun con eso debió ser una película muy dura para el espectador medio de aquella época y que trata sin tapujos un tema que aun a día de hoy sigue siendo una lacra en nuestra sociedad, como es la violencia de género y que en esta cinta está presente en todas sus facetas.
Stanley/Brando es un bruto si, pero en realidad es mucho más inteligente de lo que a priori pueda parecer. Un "Adonis" que, como queda patente en muchos momentos, sufre pese a ello de un claro complejo de inferioridad que se ve acrecentado con la aparición de la hermana de su mujer, una dama que, pese a su oscuro pasado, no comprende que Stella/Kim Hunter aguante las cosas que aguanta a su marido por amor, un amor que en realidad parece basarse casi única y exclusivamente en la atracción física pues más de una vez veremos como Stella se siente atraída y asqueada por igual por los defectos de su hombre, defectos estos que tienen que ver con la personalidad violenta y machista de Stanley.
Tenemos también a Blanche/Vivien Leigh y a un maravilloso Mitch/Karl Malden que buscan la felicidad, la una de forma equivocada y el otro en alguien que, como él, no encaja en ese suburbio donde le ha tocado vivir y trabajar. Pocas veces un personaje ha desentonado más que Mitch en las partidas de póker de Stanley y sus amigotes. Personalmente es con quien más me identifico y es quien más pena me da el cómo se desarrolla su historia.
La trama es un viaje por la locura, la de Blanche, que poco a poco va perdiendo los pocos nexos de unión que tiene con la cordura, la cual veremos pender de un hilo durante casi todo el metraje, en una interpretación sublime que no es de extrañar que le valiera un "Oscar", igual que no es de extrañar que Hunter y Malden, sobre todo este último, se los llevaran como secundarios.
Creo que las actuaciones de el cuarteto protagonista, incluido ese Brando que, en VO es muy difícil de seguir, en parte por su acento, en parte porque se pasa con la boca llena de comida gran parte de su tiempo en pantalla, son, junto a la dirección de Kazan lo que dan la fuerza a una película cuya historia no brilla por su originalidad pero que te golpea en lo más hondo, todo ello aderezado con una música que por momentos es casi más inquietante que la de muchos films de terror.
No puedo más que recomendaros su visionado, aunque se hace muy duro, sobre todo en su tramo final, pese a que es una película que, salvo que por alguna cosa me viera obligado a ello, dudo mucho que vuelva a ver. Creo que hay historias que por bien contadas que estén no están hechas para que, al menos determinadas personas, repitamos la experiencia. Ahora os queda comprobar, si no la habéis visto ya, si es vuestro caso o si sois de los que disfruta con ella pese a todo cada vez que la ve.

4 comentarios:

  1. Poco más que añadir. Lo hacéis tan bien...gran crítica chicos.
    Yo me quedo con el momento "Estelaaaaaaaa". Jajajaja.

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    1. Hola Ricky.
      Muchas gracias por leernos lo primero y por ese comentario que, como siempre nos da muchos más ánimos para seguir haciendo algo de lo que, y creo que puedo hablar en nombre de ambos, Aurora y yo disfrutamos cada vez más que es escribir juntos semana tras semana.
      En cuanto a ese momento, a mi incluso me resultó sumamente inquietante, sonaba cual alma en pena, sobre todo la segunda vez.

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  2. Hola chicos! Primero que nada gracias por la dedicatoria twitera, sois encantadores.
    En cuanto a la película, que he visto hoy, he de confesar que la he visto en VO y a veces me costaba seguirla. Eso no quita que la película me parezca una obra magnífica con un Kazan que adapta magistralmente la obra de Williams.
    En el apartado interpretativo Vivien Leigh está sobervia y Malden fantástico. Por cierto, seguramente ya lo sabéis, pero a mi me lo comentó un amigo cuando decidimos ver esta película, y es que Vivien Leigh descubrió (o vio acrecentado) un trastorno bipolar al rodar este filme.
    Estupenda entrada, como siempre
    Bicos
    krtles

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    1. Hola Vane,
      Siempre es un placer tener detallitos con todos vosotros ya que escribir podríamos escribir y, seguramente lo seguiríamos haciendo aunque no nos leyeran pero teneros ahí es un acicate para mejorar día a día.
      Yo la vi en VOSE y, sinceramente, esta si no fuera así a Brando habría muchísimas cosas que no le habría entendido si quiera. Aurora si sabía lo de Leigh pero yo no, porque la verdad es que no saco tiempo suficiente para curiosear todo lo que me gustaría. Me doy por satisfecho con ir descubriendo este gran desconocido que era para mi el "Cine clásico" hasta que, inteligentemente, conseguí que mi querida Sra. Purgatorio se animara a hacer la primera crítica juntos.

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