lunes, 21 de abril de 2014

Tren de noche a Lisboa, próxima estación, amor


Esta "pequeña" película de Bille August empieza con una casualidad, esa que habéis visto si habéis echado un vistazo al tráiler. Si, os hablo de la chica, del puente y del impermeable rojo.
Ese azar o el destino, eso lo dejo a vuestra elección, hace que llegue a manos de Raimond Gregorius (Jeremy Irons) un pequeño libro de un autor portugués, Amadeu de Prado (Jack Huston).
En cuanto lee unas pocas páginas, Gregorius se da cuenta de algo, que muchos en algún momento de la vida descubrimos, y es que nota un vacío existencial. ¿Vale la pena el camino recorrido hasta el momento presente? ¿Hemos vivido de verdad?
Así las cosas y tras encontrar dentro del libro un billete a Lisboa, el protagonista decide, sin más equipaje que lo puesto, el impermeable y el libro, embarcarse en un viaje de descubrimiento personal.
Una vez en Portugal, asistiremos al devenir de Gregorius, en su peregrinaje en busca de Amadeu o del recuerdo que de él queda en sus familiares y en quienes lo conocieron. Nos introduce así la trama en un ir y venir entre la actualidad y el convulso pasado de la dictadura portuguesa en la que se desarrolla la historia de Amadeu, Jorge O'Kelly (August Diehl) y Estefanía (Mélanie Laurent) principalmente, aunque desfilarán por ella otros personajes que a la postre serán más importantes en el momento presente que en los flashbacks.
El reparto está más que correcto en términos generales aunque destacaría a Jeremy Irons y Charlotte Rampling en la parte que se desarrolla en el momento actual y a Mélanie Laurent en la época de la dictadura. Ciertamente es un placer ver a Irons actuando de verdad en estos últimos años tras la travesía por el desierto que pasó (para llorar Dragones y mazmorras) y que actores de la talla de Lena Olin o Christopher Lee, demuestren su valía en los escasos minutos que aparecen en pantalla.
Como decía, es una película que nos habla de encontrarse a uno mismo, de hallar sentido a la vida, pero también de lo difícil que es el amor, incluso cuando se ama con toda la fuerza posible.
Evidentemente, es un film que incluso os costará encontrar en la cartelera, sin artificios, sin grandes mensajes, pero con muchos pequeños a lo largo de toda la proyección; algunos en forma de citas del libro de Amadeu que va regalándonos Gregorius, otros, en los diálogos y en los gestos de los personajes.
El primer mensaje de todos es que a veces, hay que arriesgar y tomar ese tren aunque no sepas qué va a pasar cuando llegues al destino, porque a veces, lo importante es que el viaje haya valido la pena. Para mi, en esta película, lo ha valido.

2 comentarios:

  1. SE AGRADECEN LOS COMENTARIOS, FOTOS, Y CRITICAS SOBRE LAS PELI, PERO PONGAN ALGUN LINK PARA VERLAS

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  2. Para eso puedes googlear tú... Ah y esta película, como todas las de estreno que tienen crítica aquí, las veo en un link que se llama cine. Solo hay que pagar la entrada.

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