No soy mucho de este tipo de lectura, ni novela romántica y mucho menos erótica, lo intenté una vez con "Pídeme lo que quieras" de Megan Maxwell y terminé un tanto... bueno quizás mejor leéis la reseña que escribí en mi otro blog Buhonero de la Aurora. Abajo os dejo el enlace de esa reseña. El rollo BDSM no me atrae lo más mínimo.
Tampoco he caído en la "tentación" de leerme la triología de las sombras, sobretodo porque el affaire que se trae el señor en cuestión con la virginal estudiante de literatura no me entusiasma. Pero vamos a lo que vamos. Decidí darle una oportunidad a esta novela de Mar Montilla a la que sigo por Facebook y por Twitter. Ella en su blog nos va dejando aperitivos deliciosos así que allá que me lancé a vivir una pasión de esas que todas soñamos, o no.
Edurne, una ginecóloga de cuarenta y ocho años, nacida en el seno de una acaudalada familia vasca, decide darse las vacaciones de su vida después de su divorcio. Qué mejor lugar que Marruecos, un lugar que a mí personalmente me atrae sobremanera, hace poco se me escapó de entre los dedos la oportunidad de hacer ese viaje, pero otra vez será. El viaje que al final hice tampoco tuvo desperdicio, pero eso es otra historia.
Como dije al principio estaba un poco escaldada con este tipo de lectura pero esta novela me ha seducido, me ha transportado, he sentido el calor del desierto, el sabor del té a la hierbabuena, el dulzor de la miel, el vaivén del camello, el sudor de los cuerpos fundidos en uno y... me ha encantado. Mar es elegante en las escenas eróticas que nos describe y no es un constante "revolcón" tras otro si me permitís la expresión, o un apresurarse en su prosa para llegar al siguiente momento de clímax, no, es mucho más. En su novela hay sentimientos, los de una mujer madura pero viva, con ganas de vivir y disfrutar de su cuerpo y de la vida en general. "¿Se apacigua con los años la insensata pasión que dos personas pueden sentir el uno por el otro? No, si es amor verdadero y lo riegas a diario". Algo así nos dice Edurne. Y seguro que es verdad. El amor cuando se alimenta no se muere y la pasión se renueva como agitando una botella de champán.
Tengo la misma edad que la protagonista y aunque mi historia no tiene nada que ver con la de ella, de algún modo me identifico en sentimientos y emociones, quizás por eso me ha encantado el libro.
Solo un pequeño apunte, no sé si esto me restará puntos jajaja, pero me leí la novela con la música de la banda sonora de la película "Cincuenta Sombras de Grey"de fondo, la música es súper sensual. Igual deberíais probar.
Mi enlace a la reseña anteriormente mencionada:
Felicidades Mar Montilla por este caramelo.
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