domingo, 30 de noviembre de 2014

Brick Mansions. Clase teórica de "Parkour".

No soy un gran admirador de "A todo gas" como saga ni de Paul Walker como actor, pero aprovechando que anoche ponían "Brick Mansions", primera obra póstuma del tristemente fallecido actor, me dispuse a verla. Un sábado por la noche suele ser buen momento para esas pelis de acción sin chicha, en lo cual son especialistas los franceses, espectáculo, vacío, pero espectáculo en lo que a la realización de la acción se refiere.
Desde el principio eso es lo que vais a encontrar, con una escena inicial, quizá demasiado larga, pero adrenalínica donde veremos todas las maneras en que se puede escapar de tíos armados hasta los dientes usando el "parkour". Lo mejor es que estas escenas están rodadas de tal manera que te quedas con casi todos los detalles y piruetas que realiza el actor, algo que es de agradecer.
Una distópica Detroit es la que nos presentan en esta historia en la que los malos/pobres, viven en una urbanización que se llama "Brick Mansions", de ahí el nombre de la película, que es donde se desarrollará la práctica totalidad de la trama. Bueno, no es que en realidad haya demasiada trama, hay por ahí un rey del crimen negro que domina el cotarro, que tiene movidas con uno que también vive ahí y que está hasta el moño de que se vendan drogas y eso. Éste último es francés, cosa que dejarán claro llamándole "franchute" en numerosas ocasiones, Paul Walker se ceba con él en eso. Pues lo dicho, drogas, movidas de machotes, Walker haciendo de policía y, ah si, una bomba que Paul ha de ir a buscar al interior de la "civilizada" urbanización.
La sucesión de escenas de acción sin sentido es entretenida pese a que no acabas de entender muy bien cómo los malos pueden ser tan estúpidos, o cómo hay personajes que son capaces de dar a una mosca con un rifle de francotirador y luego fallan con un blanco de metro noventa y cien kilos de peso... Para mi resulta épica la manera en que Walker es capaz de fugarse de los sitios y arrancar volantes de coches cuando es de los más tirillas de toda la peli... exigencias del guión.
Una cosa de la que te das cuenta visionando esta cinta es de que puedes perderte diez minutos o estar a otras cosas y no te pierdes nada, porque... no pasa nada en realidad. La parte importante del guión en si no creo que ocupara más de diez o veinte líneas, me refiero a donde te cuentan algo de lo que pasa.
Los últimos compases son los que le dan ese plus de ridiculez al asunto con unos personajes que de repente empiezan a deducir mil cosas como si de un buen thriller se tratara y le abren los ojos al prota, el cual ve que no todo era como él pensaba. Eso en unos, no sé, cinco minutos que es donde Besson, guionista, trata de darle sustancia a una película totalmente vacía.
"Brick Mansions" va más allá del encefalograma plano y demuestra que algo puede entretener pese a ser nefasto, porque la película lo es, pero lo bueno es que no se toma en serio a si misma y eso la hace soportable, que no recomendable. Que esta sea una de las cartas de despedida de un actor como Paul Walker que, por otra parte, tampoco en esa faceta demostró mucho más, hace que entienda cada vez menos que cuando falleció, se le tratara casi como a un grande del cine. Que nadie me malinterprete, siempre es una lástima que una persona se vaya tan joven, pero de ahí a endiosarlos así...
Nota: 3

sábado, 29 de noviembre de 2014

La gata sobre el tejado de zinc.

Pese a tener un inicio que pudiera hacernos intuir una película con algún tinte de humor dentro del drama que nos espera, con esa tontería de macho alfa borracho del personaje de Paul Newman y la llegada a la casa de Elizabeth Taylor y su "hermosa" escena con los niños del hermano de Brick/Newman, "La gata sobre el tejado de zinc" es un drama desgarrador de principio a fin, sobre todo si has llegado a convivir mucho tiempo en pareja y las cosas se han torcido o si has pasado esas crisis existenciales que llegan con la edad.
Aunque la trama gire inicialmente en torno a la enfermedad del patriarca de esa familia sureña que tan bien consiguen plasmar Richard Brooks y James Poe, director el primero y guionistas los dos, adaptando la obra de Tennessee Williams, en realidad lo que viviremos es la historia de una pareja, Newman y Taylor, muerta emocionalmente hace mucho con una mujer que trata de recuperar el terreno perdido con su hombre, mientras este se refugia en la bebida y la trata de una manera tan fría y cínica que resulta a ratos difícil de soportar.
Entenderlo lo iremos entendiendo a lo largo de las numerosas conversaciones y comprenderemos además el por qué Brick es como es, sus frustraciones, el haber crecido en un ambiente donde el amor era escaso aunque en lo material no le faltara de nada, cosas que seguramente más de uno hemos vivido en algún momento u otro de nuestras vidas.
Me parece que una de las escenas que suceden en los primeros minutos del metraje es la mejor muestra de que una vida en pareja está más que vacía. Me refiero al sensual cambio de medias que lleva a cabo Taylor ante un impasible Newman al que solo parece importarle ya centrarse en su autocompasión. Quizá por algunas charlas posteriores entre los personajes, y la supuesta relación que podría haber existido entre Brick y su amigo de juventud, al que también conocía Maggie/Taylor. En mi modesta opinión y sin haber investigado si eso está claro, pienso que más que una homosexualidad de ambos hombres, lo que hubo fue una búsqueda de eso que en su casa y de su padre, jamás recibió, amor y cariño.
Ciertamente, Newman y Taylor están sublimes, te hacen sentir odio, lástima, pena, frustración, empatizas con ambos, aunque sea en general más fácil con ella, puesto que él tiene momentos de esos geniales como actor pero muy desagradecidos como personaje. El resto del reparto se convierten en escuderos de lujo de una pareja que mantiene casi todo el peso del film sobre sus hombros, y de qué manera. No es que ellos no sean importantes pero esta es la historia de Brick y Maggie, sobre todo de Brick.
Es una película muy dura de ver, al menos a mi me lo pareció, pero imprescindible para disfrutar del gran cine, del cine con mayúsculas. Es aun más amarga que "Agosto" de reciente realización y donde también se desarrollaba la mayor parte de la trama en una única localización y con un duelo interpretativo que mereció más reconocimiento en los últimos Oscar. Os hablo de ella porque vais a sentir cosas similares y porque son ambas películas que hay que intentar ver en un buen momento anímico, porque si no te dejan bastante mal, aunque el final de "La gata sobre el tejado de zinc" sea más esperanzador.

viernes, 28 de noviembre de 2014

El verdugo. Mucho más que una comedia genial.

No solo de Hollywood vive uno cuando se pone a saldar la cuenta pendiente con el cine clásico y esta obra magna de Berlanga creo, si la memoria no me falla, es mi primer acercamiento al cine patrio de  la época en que primaban más las ideas que el espectáculo.
La película no deja de ser un alegato contra la pena de muerte en la que se usa la figura del verdugo, en los tiempos del garrote, encarnado por un magistral José Isbert y los conflictos que se generan cuando, para poder conservar la casa que les han otorgado, el novio de su hija y marido a la postre, se ve obligado a suceder a su suegro en el gremio. Esta escena es genial sin lugar a dudas, demostrando que la administración funciona igual tanto en dictadura como en democracia.
Tratar un tema tan peliagudo como ese y en aquellos tiempos solo podía funcionar con ese humor negro y a la vez tan surrealista del que hace gala el guión y que plasman de manera sublime todos y cada uno de los interpretes. Es difícil quedarse con alguna escena en particular, aunque la esperpéntica boda y el viaje de trabajo/placer a las Baleares se llevan la palma.
La historia de amor que tenemos como parte central en muchos momentos es engañosa porque tanto José Luis/Nino Manfredi como Carmen/Emma Penella acaban juntos más por la imposibilidad que ambos sienten de ser amados por nadie, debido principalmente a las profesiones del joven y del padre de ella. Sin embargo José Luis si tiene sueños y aspiraciones que ella no comparte y que serán las que, en más de una ocasión, tendrán más carga dramática incluso que el hecho de trabajar quitando la vida a otros, cosa que, como decía Amadeo/José Isbert, alguien tenía que hacer.
Los tres actores nombrados llevan el peso del film y son los más destacados, pero veremos a muchos y conocidos intérpretes con muchos años menos encima, como José Luis López Vázquez o Alfredo Landa, que cumplen a la perfección con sus roles, pese a que el reparto es tremendamente coral y algunos personajes serán testimoniales.
Queda claro a lo largo de la cinta que Berlanga es un grande y el único pero que yo le veo a "El verdugo" es que a veces, son cansinas, por repetitivas, algunas escenas en las que José Luis/Nino Manfredi entra en unos bucles que acaban pasando de hacer gracia a desear que terminen, sobre todo porque eso sucede en varias ocasiones a lo largo del metraje. Entiendo que el personaje es así, pero a mi llegó a resultarme muy cargante.
Los créditos iniciales con la destacada música de Miguel Asins Arbó me encantaron y la verdad es que la melodía me sorprendió mucho, para bien. Parece que en eso Berlanga y su equipo también fueron unos adelantados a su tiempo.
Si hay algo que hay que dejar claro, es que para disfrutar de esta película ha de gustar mucho el humor negro y el surrealismo tan típico de la mejor comedia española, al menos a mi es la que más me gusta. Además, bajo todo ese humor, subyace una dureza muy bien plasmada en las dudas y reticencias de José Luis/Manfredi, con unos últimos minutos que abandonan el tono jocoso para golpearnos con dureza aun sin recurrir Berlanga a imágenes explícitas.
Genial ejercicio de reflexión y condena sobre la pena de muerte que se dulcifica con el humor que destila pese al oscuro trasfondo.
Nota: 9

jueves, 27 de noviembre de 2014

The Last Ship. De americanada aburrida a entretenimiento a tener en cuenta.

La verdad es que soy de los que se "traga" o le da una oportunidad al menos a casi todas las series que estrenan y tienen algo de ciencia-ficción, acción y sobre todo futuros postapocalípticos. Por lo tanto, "The Last Ship" merecía al menos una oportunidad.
Siendo sinceros, en los primeros episodios, al igual que me sucedió con la primera temporada de "Agents of Shield" la serie me pareció floja no, lo siguiente, con un patriotismo y unas "americanadas" demasiado exageradas incluso para estar ambientada en un buque de la armada estadounidense. Por si eso no fuera suficiente, nos meten también por ahí a los rusos, que parecen más de la época de la URSS que la actual madre Rusia "putiniana", por Putin. Aunque al final la interacción con los soviéticos es la que va dando el giro de la serie hacia una acción muy entretenida, que es la que rescata a "The Last Ship" de ser otra de esas series tan típicas del verano en USA, que no suelen sobrevivir más allá de su primera temporada. Aun reconociendo esto, agradecí que no se siguieran recreando en ese enfrentamiento.
Por supuesto seguiremos con las típicas "americanadas" de que solo ellos son capaces de hallar la cura para un virus del que iremos descubriendo cosas poco a poco según avance la temporada y en definitiva, parece que el mundo se reduzca a EEUU, pero poco más podemos esperar cuando además detrás de esta producción se encuentra "Splosion Michael Bay Man".
El reparto puede sonaros, a mi algo me suenan varias caras pero si he de ser sincero no ubico a casi ninguno en otras series, que supongo que es su hábitat natural. Los personajes son más bien planos, aunque hay algunos interesantes, como Tom Chandler, la Dra. Rachel Scott o Tex, este último es mi favorito con su evolución hacia el final de la temporada, aunque a veces sea un poco cargante con su testosterona a flor de piel. Es probable que los que conocemos en la recta final también acaben siendo importantes y trascendentales, pero habrá que ver su evolución en la segunda temporada.
"The Last Ship" es una nueva apuesta por la temática de pandemia y por lo tanto las similitudes con "The Walking Dead" son patentes en algunos momentos, aunque no hay muertos vivientes aquí, y en lo postapocalíptico parece que va a tirar por el camino de la, también entretenida y cancelada tras su segunda temporada, "Revolution". Diversas facciones y guerras intestinas en el país de las oportunidades es lo que parece que obtendremos si, tras visionar estos once capítulos, la incorporamos a nuestro calendario "seriéfilo".
No os voy a vender la moto, "The Last Ship" es una opción al estilo de "Falling Skies" emitida en España también por "TNT" y que están pensadas para el periodo veraniego y no pretenden nada más que darnos diversión sin complicaciones. No esperéis tramas sesudas, ni una profundidad en los personajes al estilo de productos de mayor enjundia. Si os gustan las series que he mencionado es posible que las historias de estos soldados y científicos os gusten, pero aviso, tarda en arrancar y engancharte y no es apta para adictos a las series de HBO y que no conciben nada por debajo de esos estándares de calidad.
Nota: 5,5

miércoles, 26 de noviembre de 2014

El hombre de acero. El Superman a lo Nolan se quedó en el cajón al final.

Ay, Snyder, Snyder, he visto cinco de sus seis películas y la cosa va así, tres me han encantado, 300, el amanecer de los muertos y Watchmen y las otras dos, Sucker Punch y esta que hoy analizo, El hombre de acero, me han dejado muy frío salvo por su estética, pero eso no es suficiente.
Por una vez se deciden a mostrarnos en la gran pantalla las cosas que pasan en Krypton antes de que Jor-El, padre de Kal-El/Superman/Clark Kent, y su madre acaban por decidir enviarlo a la Tierra para salvarlo de la destrucción de su planeta natal. No creo que esto se aun destripe para cualquiera que conozca un poco la historia del personaje.
Lo más curioso es que, las partes que más parecen haber cansado a la mayoría, esas en Krypton y donde Russell Crowe interpreta sin alardes al padre de Clark, son las que a mi más me han gustado. Son localizaciones nuevas, descubrimos el levantamiento de las clases bajas contra la "casta" kryptoniana y vemos unas cuantas escenas de batalla bastante espectaculares y menos agotadoras que las que veremos en nuestro planeta.
Como todo el rollito de Clark de joven lo hemos visto ya varias veces, los guionistas y el director, deciden no mostrarnos todo sino tirar de flashbacks y además darnos unos cuantos planos de Henry Cavill mostrando esa pedazo de ganancia de masa muscular que se ha marcado para la peli. Que si, que yo entiendo que alegra la vista, a mi me la alegra Scarlett Johansson pero eso ni la mejora como actriz, ni mejora una película. Y es que yo a Cavill como Superman/Clark Kent me lo creo más bien poco o nada, no sé, seguramente gran parte de la culpa sea del guión que no da para mucho más. Porque seamos sinceros, eso de que iba a ser como los Batman de Nolan, más seria y tal, se ha quedado por el camino, pero vamos, como al minuto veinte de esta peli. Diez o quince minutos de cualquiera de las entregas de la trilogía del hombre murciélago tienen más chicha que casi toda la historia de "El hombre de acero".
Da pena ver a Amy Adams como una Lois Lane en plan florero en el 95% de sus apariciones en pantalla con el estado de gracia que tiene esta mujer en los últimos años y lo camaleónica que es. Luego un Kevin Costner/Jonathan Kent que interviene en las pocas conversaciones de cierto interés y al que le dan un final que bueno, sólo es superado en ridiculez por las escenas en las que un Lawrence Fishburne venido a menos va corriendo por las calles de la ciudad, en las que más que un personaje de cierta enjundia parece el típico gordo que nos ponen en esas situaciones para que nos riamos.
Que a cargo de la banda sonora esté Hans Zimmer y que no se me haya quedado grabada me hace pensar en dos posibilidades, o no es uno de sus mejores trabajos, o el sopor que me atrapaba por momentos en las interminables peleas entre Superman y sus paisanos de Krypton me hacía desconectar tanto que ni reparaba en ella; también pueden ser ambas cosas.
Ahora, ante la próxima "Batman VS Superman" tengo miedo; miedo porque Cavill no me convence como hombre de acero, miedo porque Affleck se ha mazado tanto que me augura una película con menos historia aun que esta, aunque es probable que las peleas puedan ser más interesantes, miedo porque Snyder me demuestra que tiene una épica un tanto vacía cuando no hay detrás una historia cuya épica solo tenga que adaptar a su estética y nada más.
A pesar de todo es una película que tiene sus momentos, en la que me ha encantado descubrir algo más de Krypton y en la que la estética típica de Snyder le da un plus de calidad. Es probable que a los amantes del personaje más conocedores de los cómics os entusiasme o puede que no, a mi se me hizo larga y me divirtió más el anterior intento de resucitar a Superman.

martes, 25 de noviembre de 2014

Cuéntame un Cuento: Caperucita Roja. En el reino de los lobos, el cordero es el Rey.

Tras el esperanzador inicio de la serie con "Los tres cerditos" y la decepcionante "Blancanieves" todos los que hemos querido dar una oportunidad a este experimento de Antena 3 mirábamos con desconfianza "Caperucita Roja".
De lo primero que hice fue mirar qué parte del equipo repetía, y Carlos Ruano, autor en solitario del guión de "Blancanieves" compartía esta vez esa tarea con Marcos Osorio Vidal. Esto deja claro, a mi entender, que cuatro ojos ven más que dos y que en equipo se pueden ver fallos y corregirlos dando lugar a un producto de mayor calidad.
La historia es ahora más sólida, quizá porque no trata de perderse en tantos simbolismos y metáforas y porque no nos presentan historias que parecen importantes pero luego no se profundiza en ellas, como pasaba con la relación entre la madrastra de "Blancanieves" y su hijo en el episodio anterior. 
Además, es la primera vez que se opta por hacer pensar al espectador pues aquí no hay un lobo al que claramente podamos llamar así, aunque la genial voz del narrador en off trate de vendernos que si. Entre los lobos solo hay uno de verdad y uno con piel de cordero al que costará descubrir aunque evidentemente si se está atento no será difícil.
Esta vez las metáforas serán mucho más sutiles, como el bosque o el leñador, aunque la caperuza está ahí y el juego psicológico que se hace con el espectador al usar los aullidos y ruidos del lobo en determinados momentos me han parecido geniales.
Como siempre, soy sincero en esto, y del reparto solo reconozco alguna cara y los nombres ni me suenan. Nunca he sido gran seguidor del cine español y de las series aun menos. Pero, salvo alguna sobreactuación puntual —en una de las persecuciones cuando el perseguidor se para a gritar el nombre de su presa— y Adolfo Fernández, que era la cara que más me sonaba, y que no parece terminarse de creer sus líneas de guión y por ende yo tampoco terminé de creerme a su personaje. El resto del casting cumple sobradamente con lo que se exige de sus personajes, a años luz de lo que se vio en "Blancanieves".
La dirección de Fernando Bassi y la fotografía de Alfonso Postigo ayudan también a que esta historia que no solo trata de ser oscura, sino que lo consigue, llegue de una manera directa y sin florituras al espectador, con una escena final muy bien escrita y rodada, con un giro de tuerca de esos que se agradecen y que nos lleva a la moraleja del cuento. Ahí afuera hay muchos lobos, demasiados lobos y lo difícil es reconocer a los que se esconden entre los corderos.
Ha sido una pena que el fiasco del segundo capítulo haya perjudicado de esta manera a la serie, porque anoche ni "Cuéntame un cuento" ni "Caperucita Roja" fueron Trending topic durante la emisión y además, demostrando su confianza en la serie, el grupo de Antena 3 se hace la competencia a sí misma estrenando en la sexta su programa de casas de empeños a la española.
Yo os recomiendo que le deis una oportunidad a esta "Caperucita Roja" que está muy por encima de "Blancanieves" y que incluso supera, a mi modesto entender, a "Los tres cerditos".
Nota: 7

lunes, 24 de noviembre de 2014

Los Juegos del Hambre: En Llamas. El "Sinsajo" voló del nido.

Empezando donde nos dejaron en la primera entrega, En Llamas nos muestra, muy por encima, ese triángulo amoroso Katniss/Peeta/Gale que seguro debió dar muchísimo más juego en los libros pero que en los films te deja un tanto indiferente, por escaso. Lo que si veremos es la falsedad de la situación en la que viven la joven pareja interpretada por Lawrence y Hutcherson y cómo su tour por los diferentes Distritos como ganadores de la última edición de los juegos no surte el efecto deseado por el Capitolio ni el que ellos esperaban.
Pese a que se nos muestra más del contexto social y de lo que sucede en Panem, está claro que en el cine lo importante es la evolución de los dos principales protagonistas, cómo viven y sienten su entorno. Si que nos dejarán claro, por si no había quedado patente en la primera, que el control que se ejerce es mediante la fuerza y la represión, muy bien plasmada con la llegada de los "Agentes de la Paz" al distrito doce. No deja de ser curioso los nombres con que se suele denominar a estos cuerpos militares o policiales en estas obras distópicas.
Cuando necesitas acabar con héroes y hacerlo directamente es contraproducente a tus intereses, siempre hay otras maneras y así, aprovechando el "Vasallaje", realizado cada veinticinco ediciones de los juegos, el Presidente Snow/Donald Sutherland obliga a que sean los ganadores de pasadas ediciones quienes participen en tan señalada edición. Será así como descubramos que hay "tributos" profesionales que luego resultan ridículos, porque, una vez en la arena de juego, no se tiene noticias de ellos prácticamente en ningún momento.
Las numerosas alianzas entre nuestros amigos y otros participantes harán que, al contrario que en la anterior entrega, podamos empatizar algo más con otros personajes aunque en general siguen siendo meros añadidos prescindibles en su mayoría. Todos son bastante arquetípicos pero mucho más interesantes que los "tributos" de la primera película. Eso si, no sé como será la voz de Jenna Malone, para mi la incorporación más interesante, pero el doblaje es de esos que te taladran el tímpano y llegan al cerebro. Sé que eso no es culpa de ella pero hace que el disfrute sea menor.
Sin lugar a dudas Jennifer Lawrence vuelve a ser la mejor con diferencia y es un placer ver por ahí a Philip Seymour Hoffman, aunque sea en un papel menor, demostrando que vale lo mismo para un roto que para un descosido. Una pena que ya solo nos queda verle así y no haciendo cosas nuevas.
Evidentemente, la dirección de Francis Lawrence parece algo mejor que la de Gary Ross, pero imagino que también la historia de "En Llamas" es más sólida y más agradecida a la hora de adaptarla. En el resto de aspectos sigue a un nivel muy alto, sobre todo en lo técnico, vestuario, localizaciones, con una arena que ya no es solo un terreno donde los humanos deban darse caza unos a otros, ahora es parte muy importante del juego.
Puede parecer un más de lo mismo sin mayores aspiraciones, pero creo que aquí se profundiza más en todos los aspectos y sobre todo en Katniss y Petaa que está claro que es el camino que se ha tomado con las películas, en detrimento de la parte socio política. Hay que entender que el cine es el cine y los libros son los libros y que además "Los Juegos del Hambre" tiene un "target" muy concreto, que es el público adolescente y al público que va mayoritariamente a las salas de cine a entretenerse sin muchas más pretensiones. Igual si quieres algo más sesudo es que equivocaste la elección con la primera y volviste a caer con la segunda; ya sabes si te engañan dos veces...
A mi me gusta esta trilogía y en cuanto me sea posible iré al cine a ver "Sinsajo" pero comprendo que para mucha gente es insuficiente lo que ofrece este producto que entretiene pero se queda un poco lejos de servir como una verdadera crítica social.

domingo, 23 de noviembre de 2014

True Detective. Temporada 1. ¿Obra maestra? Para mi no.

De por si, no soy mucho de calificar a nada como obra maestra o la mejor película o serie de la historia. Es pecar de soberbia decir eso cuando es imposible que nadie haya visto todo lo hecho para saber que eso ante lo que se está merece tal calificativo. Yo sé lo que me gusta nada, poco o mucho y dentro de esos baremos me muevo siempre. Es por eso que siempre cojo con pinzas cualquier producción que la crítica o la gente me venda como "lo mejor que verás en tu vida" y frases de similar calado.
Con ese recelo pero con ganas me puse a ver "True Detective" con un Matthew McConaughey que lleva ya unos añitos en estado de gracia y un Woody Harrelson que hace ya tiempo regresó al buen camino también y es una gozada verle haciendo lo que sabe hacer.
Es indudable que ellos dos, sus personajes, son lo mejor con diferencia de esta primera temporada de una serie que, para mi, no deja de ser una serie policial más y que sigue la moda de la pareja de detectives que investigan un caso de esos que te revuelve las tripas. De lo que yo he visto, me recuerda en algunos momentos a Hannibal.
Si he de ser sincero, los momentos que más he disfrutado han sido los que menos acción tienen, es decir, cuando Rust Cohle/Matthew McConaughey y Martin Hart/Woody Harrelson son entrevistados/interrogados y donde McConaughey se muestra más camaleónico, no solo por la caracterización, sino por el cambio del personaje, mucho más acusado que el del detective interpretado por Harrelson.
De factura técnica impecable y con una banda sonora muy buena y adecuada a la zona y a la época donde se desarrolla la acción y con una de las intros que más me han gustado en los últimos tiempos, me parece que la serie falla en algo fundamental para llegar a ese pedestal tan alto en la que la sitúa casi todo el mundo; me refiero a la historia, al guión.
No hay nada nuevo en realidad y las charlas existencialistas a las que Rust somete de vez en cuando a Martin no me son suficientes para decir que me están contando algo que no me hayan contado antes mil veces en series del estilo. Nada de lo que va pasando te sorprende realmente. Detective que no es capaz de olvidar un caso y que le afecta tanto como para dejarle hecho una piltrafa, los roces entre compañeros y su jefe cuando les presionan para resolver el tema con la mayor celeridad... no me malinterpretéis, pero si me dicen que algo es una maravilla espero al menos algo que me haga exclamar "¡¡Ohhhh!!" según avanza la trama. Sé que la originalidad es casi imposible a día de hoy pero si algo que diferencie tu historia de las otras, no sé, veinte o treinta series policiacas en antena.
A lo peor, los que hayáis leído hasta aquí pensáis que la serie me ha parecido mala pero no es el caso. El problema es que me esperaba algo de sobresaliente y no es lo que he encontrado, no al menos en todos sus aspectos. Lo es en las interpretaciones de los dos enormes actores protagonistas y en la factura técnica y la dirección pero lo que nos cuentan lo podemos ver casi cada semana en varias series más.
Una buena serie y recomiendo verla aunque solo sea por disfrutar de McConaughey y Harrelson pero avisados quedáis, se os puede hacer tremendamente lenta y pesada en determinados momentos. No es que eso sea malo per se, pero no esperéis acción a lo loco y disparos a mansalva. Es casi pura y exclusivamente trabajo de investigación aunque tendrá sus momentos más intensos y moviditos.

sábado, 22 de noviembre de 2014

El planeta de los simios (2001). Un Burton sin sustancia.

Pese a ser Burton uno de mis directores preferidos, no dejo de reconocer que hay algunas películas suyas cuyo interés no va más allá de ver cómo plasma su peculiar visión gótica y oscura de casi todo lo que mira. quiero sus gafas. Su remake de "El planeta de los simios" es uno de esos films.
Prácticamente desde que el primer mono empieza a chillar en el simulador de vuelo hasta que acaba la película no hay ni un respiro pero tampoco historia. No se profundiza en casi nada de lo que vamos viendo y todos los personajes humanos que no son Mark Whalberg tienen en realidad tan poca trascendencia que igual podían haberse ahorrado el presupuesto en contratarlos.
Lo único realmente destacable y que se puede salvar es todo el trabajo de caracterización y maquillaje de los simios y la interpretación de los actores que los encarnan, especialmente Tim Roth y Helena Bonham Carter.
Wahlberg nos "regala" probablemente la peor actuación que yo le recuerde pero es que, con ese guión y con ese modelito que me lleva, que no sabes si se acaba de quitar un traje espacial o acaba de salir de una pasarela de moda, debía ser complicado creerse que estaba interpretando al mismo personaje que interpretara en su día Charlton Heston.
Pues nada, hay muchos saltos de simios, humanos que huyen, piques entre simios y humanos que huyen juntos, lo cual provoca más saltos inverosímiles de los macacos en cuestión y hay un lugar al que se tiene prohibido ir y que esconde todos los secretos :o Será ahí donde asistamos a la gran batalla con muchos más saltos, más carreras y testosterona simiesca, tanto de los humanos como de los monos, que se resolverá de manera un tanto ridícula.
Llamadme exigente, pero que personajes que tienen un fanatismo religioso exacerbado pasen de eso a creer en un mundo color de rosa en poco más de cinco minutos me parece cogido por alfileres microscópicos, si tal cosa existiera.
Los guionistas y Burton hacen una especie de coctel de viajes en el tiempo, universos paralelos y, lo que me salga de salva sea la parte para impactarnos con un final que, aun siendo posiblemente lo mejor de la cinta, no solo porque se acabe, no seáis mal pensados, queda muy lejos de la icónica imagen que a todos nos viene a la mente cuando pensamos en la película protagonizada por Heston.
Si no le doy menos nota es porque pienso que el trabajo técnico es grandioso en muchos aspectos y también hay que valorar eso y lo creíbles que resultan esos homínidos sin necesidad de recurrir a técnicas de animación como las actuales.
Nota: 4 

viernes, 21 de noviembre de 2014

Monster House. Aterradoramente divertida.

Hace años ya me convenció esta película que Disney Channel emitió en Halloween y que ha tenido que esperar a tener crítica veintiún días. Tal y como recordaba es, probablemente, una de las pocas películas que de verdad buscan asustar a los niños con su atmósfera y con algunos momentos muy bien logrados.
Como todo buen niño, para D.J. es casi imposible no sentirse atraído por el misterio que rodea a la casa de su vecino de enfrente, el señor Nebbercracker; al parecer el anciano cascarrabias no soporta la felicidad de los infantes y, juguete que cae en su césped es juguete que "confisca". Asistiremos como espectadores a las aventuras de D.J. y sus amigos para resolver el enigma del encantado edificio y de su demente propietario.
Pese a que la animación de los personajes es robótica en ocasiones, el entorno, y en particular la casa protagonista del título presentan un gran acabado y, sobre todo en la parte final, disfrutaremos de un sobresaliente trabajo de los animadores cuando todo se desmadra.
Es esta una película con algunos diálogos y escenas que, sinceramente, no pillarán los más peques de la casa y que a algunos, a mi nena le paso, les pueden asustar. No puedo deciros edades, porque ella va para siete y se fue a su habitación con la abuela y el peque, de cuatro, quería seguir viéndola y la terminó.
Y es que, a partir de que los niños consiguen acceder al interior de la casa, los juegos de luces y sombras y las cosas que van descubriendo son un tanto inquietantes. Los diálogos son otro aspecto a destacar, con conversaciones muy realistas y muy adultas entre los jóvenes. Como ejemplo, cuando D.J. pregunta a su mejor amigo por sus padres, éste le dice que su padre está en casa y su madre con su entrenador personal, dando a entender que... bueno, ya sabéis.
Otros personajes, como el "friki" de los videojuegos al que acuden pidiendo consejo los tres amigos o los policías, darán ese toque bizarro y de humor que casi siempre funciona tan bien en este tipo de producciones.
No es que la historia sea novedosa, pero es ideal para Halloween o para hacerte una sesión de "terror" para toda la familia y además, no toma por tontos ni a niños ni a mayores, lo cual es de agradecer.
Es curioso que su director, Gil Kenan, va a ser el encargado de traernos en 2015 el Remake de "Poltergeist" que es además su tercer largometraje. De terror para niños a intentar asustarnos de nuevo con un clásico renovado, algo no solo difícil sino muchas veces incomprensible y achacable a la alarmante falta de ideas o de ganas de arriesgar en Hollywood.
Está fuera de las grandes ligas, ni es Disney ni es DreamWorks, pero Monster House es un producto de calidad, probablemente desconocido por muchos y al que vale la pena darle una oportunidad. Como padres, debéis valorar vosotros si puede asustar o no a vuestros peques, porque no todos son iguales y no es necesario hacerles pasar malos ratos sin necesidad.
Nota: 7
Nota Infantil: 8

jueves, 20 de noviembre de 2014

Las diabólicas. Dos mujeres y un destino.

Yo soy mucho de hacer las cosas así, porque si, según me vienen, en lo que al blog y a la cuenta de twitter se refiere. Al ver que llegaba a los 666 seguidores en la red social del pajarito me dije: "Le voy a pedir a ese seguidor que me diga una película, a ser posible de terror, para hacer una crítica dedicada". Roberto C. Rascón eligió esta película francesa de 1955.
Cuando dos mujeres son vejadas y utilizadas, maltratadas, por el mismo hombre se produce un nexo de unión que les lleva a plantearse soluciones que de otro modo habrían sido impensables; sobre todo para la menuda y falta de salud Christina Delassalle/Véra Clouzot, totalmente anulada por Michel Delassalle/Paul Meurisse. Será por lo tanto Nicole Horner/Simone Signoret la que lleve la voz cantante y tire de Christina cuando esta se vea superada por las circunstancias, ante lo que van a hacer, primero, y con el curso que van tomando los acontecimientos una vez hecho, después.
El trabajo de dirección y de guión, también participa en él, de H.G. Clouzot me parece excepcional, a la altura de los mejores thrillers de Hitchcock y con giros mucho mejor traídos que los de , por ejemplo, la reciente Perdida de Fincher. Vives en cada momento la tensión que soporta Christina en un camino que no sabes si la lleva hacia la locura o si lo sobrenatural te va a sorprender a la vuelta de cada esquina. La trama nos irá conduciendo en un crescendo de misterio hasta uno de los finales mejor ejecutados que he visto últimamente, con una vuelta de tuerca final inesperada que te deja con esa sensación de estar ante cine con mayúsculas.
El trabajo del trío protagonista Simone Signoret, Véra Clouzot y Paul Meurisse, es en gran parte culpable de que nos metamos aun más en una historia preñada de misterio casi desde el primer minuto, con una música de Georges Van Parys que deja bien claro desde los títulos de crédito que estamos entrando en el terreno del terror, del psicológico, no del obvio y más sangriento.
Me gustan mucho estas películas que huyen de las prisas para irte desgranando los secretos pero que tienen el ritmo adecuado para no aburrirte en el proceso, que huyen de artificios y giros efectistas de cara a la galería, innecesarios, porque en "Las diabólicas" todo tiene sentido, todo está ahí por y para algo.
Es obvio que estás ante algo grande cuando habiendo pasado casi sesenta años una película es capaz de sorprenderte a lo largo de su metraje en más de una ocasión y esta joya del thriller francés lo consigue. Difícilmente habría llegado a ella por mi mismo, porque hay tanto cine por ver y desconozco tanto de todo lo anterior a los años setenta que el simple hecho de buscar ya se convierte en una tarea difícil de afrontar. Por fortuna y gracias a Roberto, he descubierto esta película cuyo visionado os recomiendo sin ningún género de dudas.