Hoy una crítica más ligera de una película más ligera que la trilogía de la que hablaba ayer.
Se trata de Chicken Little, el intento que hizo Disney, cuando aun no había ocurrido la fusión con Pixar y el éxito actual con la compra de Marvel y Star Wars estaba aun muy lejana, de demostrar que estaba a la altura de Lasseter y los suyos. Pero no, ni se acercan.
Es una película de instituto con animales, donde veremos a todos los prototipos típicos de estas historias: el empollón, el pringado, el matón, la "reina del baile", etc.
La animación tira mucho de diseños coloridos y simpáticos en su mayoría, que harán las delicias de los más pequeños y que nos sacarán más de una risa con alguno de los amigos del protagonista. No es de lo mejor que hayamos visto, pero tampoco se puede decir que en este aspecto no se haya trabajado lo suficiente.
El guión tampoco brilla por su originalidad, aunque es de agradecer que en la invasión alienígena haya tantos guiños a la guerra de los mundos y a muchos otros grandes mitos de la ciencia ficción, Star Wars entre ellos, que harán el rato mucho más ameno sobre todo a los papis frikis como un servidor. Lo malo es que todo eso queda fuera del alcance de los niños, porque Chicken Little está dirigida principalmente a ellos.
Tenemos los temas recurrentes de siempre en la factoría, drama familiar, amistad, afán de superación, pero no se profundiza en ninguno lo suficiente para que te remueva por dentro, como si suelen hacer en muchas de sus películas los genios de Disney en general y Pixar en particular.
Así las cosas, si os gusta la animación tanto como a mi, tenéis peques que ronden como mucho los seis o siete añitos y crecisteis con el cine de ciencia ficción y fantástico de los 70/80, este film os asegura una tarde entretenida con los peques y unas palomitas en casa. A los demás seguramente os parecerá aburrida y simple.
Nota: 5
Nota infantil: 7
No hay comentarios:
Publicar un comentario