domingo, 1 de marzo de 2015

Crash. Todo empieza con una colisión.

En la semana de los "Oscar" casi todos los canales de televisión emitieron películas que habían sido premiadas en anteriores ediciones y en "Paramount Channel" hicieron quizá una de las mejores selecciones posibles teniendo en cuenta sus límites a la hora de emitir películas. Entre ellas estaba esta magnífica historia, tan real como la vida misma, pero que consigue ser más entretenida que la mayoría de las películas que tratan de enseñarnos el día a día de las personas.
Como ya digo en el título, veremos como todo se inicia por un choque entre dos coches y cómo a partir de ahí, las vidas de numerosos personajes, una de las películas más "corales" que os podáis echar a la cara, se irán cruzando e interconectando aunque a priori pueda parecernos casi imposible que unos tuvieran nada que ver con otros. Pero ahí está la gracia de la vida y de la película, ¿son casualidades o es el destino lo que pone en nuestro camino las cosas o personas que acaban marcando el devenir de nuestros pasos? Eso ya es algo que queda a discreción del consumidor de esta gran cinta que supuso el debut de Paul Haggis, guionista de "Million dollar baby", en la dirección de una manera, diría que rozando el sobresaliente.
El tener un reparto tan heterogéneo y variopinto es un arma de doble filo, porque si alguno de esos actores o actrices está demasiado acostumbrado a ostentar un rol protagonista, puede notarse que su capacidad como secundario se vea mermada pero creo que tanto Haggis como el propio elenco consiguen estar por encima de eso, siendo especialmente sorprendente el caso de Brendan Fraser y Sandra Bullock que se prodigan muy poco fuera de su nicho habitual de mercado, que suele ser la comedia más que el drama. Si, ya sé que ambos han hecho otras cosas y no lo hacen mal, pero teniendo en cuenta que suelen estar acostumbrados a ser cabeza de cartel, me sorprendieron gratamente.
Aunque es difícil quedarse con alguien en un film de este calado, sin duda me decanto en este orden por Michael Peña y Matt Dillon geniales ambos, el primero como padre que trata de apartar a su hija de los ambientes donde él creció; la escena de la conversación con la niña bajo la cama me llegó al alma. Dillon, por su parte, es el típico personaje que nos demostrará, pese a resultar odioso, que no todo es siempre tan blanco o tan negro, cosa esta última que viene muy a cuento con esta película.
"Crash" nos habla del racismo y la hipocresía de la sociedad estadounidense de una forma bastante cruda. Hay conversaciones que te dejan bastante mal cuerpo, por no hablar de algunas escenas también y que te hacen pensar hasta qué punto hemos evolucionado realmente. Y lo que me planteo siempre con este tema es si a día de hoy seguimos siendo racistas o somos racistas/clasistas, porque a buen seguro que a nadie molesta ese negro que mete cuarenta puntos cada noche en la NBA o ese compañero de trabajo sudamericano que se gana los cuartos igual que tú y que yo, pero si miramos con recelo a quien está fuera de lugar, como sucede en una de las escenas de "Crash".
Haggis decide usar el recurso filosófico del eterno retorno para poner punto final a una cinta que recuerdo haber empezado a ver, no sé si la vi entera porque había demasiadas cosas que no me sonaban de nada, y que me pareció decepcionante, pero que esta segunda vez, quizá porque yo he cambiado, o quizá porque ahora soy capaz de profundizar más en determinados aspectos, me ha parecido una pequeña joya del cine, que no una obra maestra. La recomendaría sin dudar y creo que pese a su dureza, es una película para revisionar cada tanto tiempo porque seguro que cada vez se descubren más pequeños detalles.
Nota: 8

2 comentarios:

  1. Lo cierto es que es una película que a mí en particular me pareció dura, algunas de sus escenas me impactaron bastante por decirlo de algún modo, sí ya lo sé soy muy sensible pero qué le voy a hacer. Tu crítica como siempre es excelente Rudy.

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    1. Hola preciosa.
      No creo que sea porque eres muy sensible, la película tiene algunos momentos muy duros e incómodos de ver pero a la vez es muy realista y no se ceba tampoco en decir que hay malos muy malos y buenos muy buenos.

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