Coherence, pocas veces tan poco dio para tanto.

A veces es curioso ver películas como esta que, con una cena entre amigos y partiendo de la base de la paradoja de Schrödinger, consiguen, con presupuestos más que ridículos seguramente, hacer pequeñas joyas dentro de un género que suele vivir de los efectos especiales cuando hay pasta, o de ideas, hasta cierto punto originales, como es el caso que nos ocupa.

"Coherence" hay que afrontarla como lo que es, una cinta que apuesta por la historia y las interpretaciones del elenco más que por sorprendernos con fuegos de artificio que después quedan en nada o que esconden un contenido muy simple con un envoltorio que entra por los ojos. La simplicidad de "Coherence" va por otros derroteros muy distintos, esto es, toda la trama se desarrolla dentro o en el entorno cercano de la vivienda donde un grupo de amigos se reúnen para cenar una noche en la que además algo único en la vida del planeta y por ende en las suyas propias está sucediendo. Todo eso se irá desgranando poco a poco y no diré más porque es de esas películas que has de ver sabiendo lo menos posible.

Evidentemente es de esos films que requieren de toda tu atención e incluso de posteriores visionados para ir captando nuevos detalles y disfrutar de cosas que se te escaparon y que pueden incluso hacer que tus teorías sobre lo que has visto cambien radicalmente. Opino que a grosso modo, es posible un cierto entendimiento de lo qué sucede aunque el cómo y por qué sucede es quizá lo más difícil de aprehender. Considero que entendí en su mayor parte lo que el director y guionista, James Ward Byrkit y su co-gionista, Alex Manugian, trataron de contarme y de plasmar en la pantalla en la hora y media escasa que dura la experiencia. Las reflexiones de los personajes, sus reacciones ante los hechos que están viviendo, la racionalización de determinadas cosas que les suceden de cara a entender lo que está pasando me parecieron sublimes, sobre todo en el tramo final.

Si he de ser sincero, el reparto me convenció sobremanera, teniendo en cuenta que todos o casi todos son poco o nada conocidos, o han estado desaparecidos en los últimos años, como es el caso del, muy conocido por los que seguimos en su día "Buffy: Cazavampiros" Nicholas Brendon. Destacaría a Emily Baldoni, que es la primera a la que vemos en pantalla y la que va sufriendo una evolución más interesante a lo largo del film. Como curiosidad y por lo que leo en las fichas de la peli, Manugian no solo escribió parte del guión sino que también actuó. A Maury Sterling es a otro que sabía que había visto y al parecer es normal porque es habitual en series aunque más en capítulos sueltos que como personaje habitual.

En definitiva, estamos ante una pequeña producción que apuesta por contarnos algo y sacar el máximo jugo a los pocos recursos de que disponía el equipo para darnos ciencia-ficción más que digna y solo queda esperar que no pase como con otros, que en cuanto pillan más dinero se van a lo "mainstream" y a los blockbusters vacíos de contenido. Quizá no sea una película para todo el público por determinadas implicaciones científicas y eso pero yo, que soy de letras, considero que comprendí casi todo y lo que es seguro es que la disfruté enormemente y encima, como la paradoja en la que se basa, puede dar lugar a numerosas interpretaciones así que vedla y teorizad ;)

Nota: 8
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