domingo, 12 de abril de 2015

Ficción en España, ¿tenemos lo que nos merecemos?

Con el final de "El Ministerio del Tiempo" a la vuelta de la esquina y con las promos, destripes más bien, de las series en emisión o las que están por llegar a las televisiones en abierto y de factura nacional me dio por empezar a pensar ayer y estructurar hoy mientras me ponían las corrientes en rehabilitación —a veces me siento un poco como el monstruo de Frankenstein— esta entrada que vais a leer hoy.
Hace pocos días se estrenó "Allí abajo", serie que se han cansado de decir hasta la saciedad que estaba ideada antes que "8 apellidos vascos", cosa que, la verdad, importa poco porque está claro que han aprovechado el tirón de dicha película para explotar una incomprensible gallina de los huevos de oro si tenemos en cuenta que casi siempre se cacarea que queremos cosas diferentes en el panorama patrio de ficción. En esta serie es el vasco el que se va a Andalucía, a diferencia de la película protagonizada por Dani Rovira y, por los pocos fragmentos que vi, tiene muchísima menos gracia y es aun más "más de lo mismo" que la comedia que se llevó "Goyas" a su reparto habiendo un secundario como José Sacristán que se salía en "Magical Girl" una de esas películas que, sin ser realmente originales en su historia, si lo es algo en su planteamiento y, sobre todo, dentro de lo que se hace en este país.
Porque, aunque a algunos les cueste entenderlo, creo que eso de valorar un producto como "El Ministerio del Tiempo" que si, que a nivel mundial no será original, como en realidad tampoco lo son muchas de las series con las que os veo flipar en mi timeline, comparándolo con lo que hacen en la HBO o en la BBC por poner dos ejemplos de cosas hechas a base de talonario, con lo cual la calidad no solo es esperable sino exigible, o tratando de aprovechar al máximo los recursos, no solo es injusto sino que no se ajusta a la realidad.
Desde la época de "Siete Vidas", aunque fue degenerando y perdiendo calidad según modificaban el reparto, no ha habido una comedia realmente inteligente en nuestra televisión, o al menos no con éxito de verdad. Vivimos a base de clones de "Aquí no hay quien viva", que tuvo su gracia un tiempo, o de comedias como una que pillé el anuncio de casualidad y en el que el diálogo venía a ser algo así como: "Si sigues así no me vas a quitar las bragas hasta mañana" para rematarlo con un "Ahí viene mi marido" cuando se oye un ruido de fondo... sinceramente, con esos antecedentes, ¿qué se puede esperar de una serie que se anuncia así?
Si queremos tener una parrilla variada no solo hay que mirar si el presupuesto da o no da, porque no creo que el dinero invertido en la infame "Alatriste" —por cierto Reverte que no se puede vender los derechos y olvidarte del proyecto para luego andar lloriqueando por las redes sociales, ¿eh? Seamos serios— fuera mucho mayor que el que ha disfrutado la cancelada "Víctor Ros" o la ya mencionada varias veces "El Ministerio del Tiempo" y, con sus fallos y limitaciones, tienen ambas unas ambientaciones de muchos más kilates que la susodicha adaptación del personaje literario. Si queremos ser capaces de generar productos de calidad hay que empezar por la base y dar a nuestros actores y actrices, desde edades tempranas, la oportunidad de probar diferentes registros, que no toda historia acabe siendo a la larga un culebrón en el que, como en viveros de actores como fue "Al salir de clase", acaban liándose y acostándose todos con todos de tal modo que ya hasta dudas en algún momento de si ha habido algo incestuoso. Porque, pensadlo bien, quizá no es que en nuestros elencos de intérpretes no haya nadie con capacidad de abordar diferentes tipos de personajes, es que para aprender a hacer algo hay que practicarlo. Si a ti siempre te ponen a hacer o te llaman para hacer un "Velvet", o un "El Internado" o peor aun, no te atreves a intentar otras cosas, nunca evolucionarás.
Me es imposible, en este sentido, no recordar el coloquio que hubo en la "FNAC" de Callao en Madrid, hace ya un par de años, con motivo de la salida a la venta de un libro de relatos cortos sobre el universo de "REC", donde la propia Manuela Velasco dijo que uno de los mayores problemas de los actores y actrices en España es que si llegan al mundillo demasiado pronto, y adquieren fama rápido, se olvidan de que han de seguir preparándose, estudiando, para elevar su calidad como intérpretes y alcanzar su máximo potencial. Y es que es verdad ¿acaso tú, que lees esto ahora, no has tenido que reciclarte o aprender cosas nuevas para subir en tu trabajo o simplemente para adaptarte a las nuevas circunstancias?
El cine y las series de producción nacional son mucho más que drama, chistes fáciles y tetas y culos, pero si pedimos, si exigimos que sea más que eso, hay que premiar a los que intentan desmarcarse, porque si series como "Cuéntame un cuento", "El Ministerio del Tiempo" son vapuleadas por el simple hecho de ser españolas o, porque su calidad no es excelente, y las audiencias son ridículas y luego le damos no sé cuantos millones el día del estreno a un humor y a una manera de hacer ficción más que rancia, casi caduca, como "Allí abajo", "Con el culo al aire", "La que se avecina" y similares, lo único que podremos acabar diciendo es que realmente, tenemos la ficción que nos merecemos.
Recordad esta frase "Roma no se hizo en un día" así que no podemos pretender que tras años de el mismo tipo de productos, los primeros que salgan que intentan algo diferente sean ya los mejores. En otros países hay una base muy sólida desde hace mucho que nosotros empezamos a construir ahora.

6 comentarios:

  1. Amén Rudy!! Tienes mucha razón, pero es que todo reside siempre en lo mismo. La gente que pide a gritos una mejora en nuestros productos, la gente que realmente se deja la piel, o el sueldo, en cultura, hace ya tiempo que ha dejado la tele. Conozco a mucha gente que no tiene televisión en casa, ya que están hartos de las barbaridades que se ven y se escuchan en ella. Han desistido hace tiempo y lo ven todo online o por canales de pago. Yo, personalmente, soy una consumidora voraz de tele, pero soy muy selectiva. "Velvet" por ejemplo, me gusta, pero por sus actores secundarios, la historia central ya aburre. Soy fiel seguidora de "Cuéntame como pasó" desde que empezó y ahora no me pierdo un capítulo de "El Ministerio del Tiempo" por varios motivos: las interpretaciones me parecen buenas, destacando a esa Aura Garrido que es un ángel hecho mujer; los episodios, basados en hechos históricos me parecen muy cuidados y esos guiños de humor que me parecen fantásticos. Además, se pueden permitir el lujo de meter anacronismos por el hecho de viajar en el tiempo.

    Tienes muchísima razón, pero como bien dices, lo triste es que no concuerda lo que se demanda con lo que realmente se ve. Y ya no sé si es que lo demandamos muy pocos o somos unos hipócritas de mucho cuidado.

    Gran artículo Rudy!!!
    ;)

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    1. Hola Lori.
      Pues es que ahí está el quid de la cuestión. Lloramos porque aquí no se hace nada diferente pero luego, no solo quienes las siguen, sino los haters, ayudan a que esas series sean TT e incluso las ven solo para ponerlas a caer de un burro. Evidentemente yo no pido que no haya lo que hay, pido que se diversifique y se trabaje con los interpretes sobre todo, porque creo que en cuanto a guiones solo hay que dar la oportunidad.

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  2. Gran artículo Rudy. Estoy muy de acuerdo contigo en muchas de las cosas que dices. En otras no tanto. Yo me reí mucho el otro día viendo al vasco pasarlo mal en el hospital andaluz, aunque es evidente que no es un género que tenga mucho recorrido.
    Soy un enorme defensor de las series de aquí entre las que destaco productos actuales como Bajo Sospecha o Sin Identidad, series que están bien hechas, con buenas actuaciones y unas tramas interesantes. Por destacar dramas simplemente. Pero también he de confesar que La que se avecina o El Chiringuito de Pepe me hacen pasar un rato divertido. También hay esperpentos como la nueva de Resines que son bochornosas. Es evidente que hay de todo.
    Creo que les exigimos demasiado a las ficciones de este país, habiendo muchas que merecen la pena antes incluso que las que nos tragamos sin control provinientes del otro lado del charco.
    Gran artículo chaval!!!

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    1. Buenas Ricky.
      Reconozco que a mi la comedia española en general no me gusta. Soy más del tipo de humor que hace Sánchez Arévalo en sus películas que del que solemos tirar habitualmente así que muchas de las series que hay en parrilla, solo con ver el tráiler ya no me llaman nada a verlas.
      Que hagamos cosas como "Bajo sospecha" o "Sin identidad", que aun no he visto, sea cual sea su nivel de calidad, es bueno, porque no se puede pretender tener el nivel de determinadas producciones extranjeras cuando nosotros estamos empezando a hacer determinadas cosas que ellos llevan haciendo décadas.

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  3. Bueno, supongo que la cosa está ahí, como bien dices. Yo creo que, por un lado, están las productoras y las cadenas, que siempre optan por aquello que siempre ha funcionado. Y luego están los espectadores, que están tan acostumbrados a tragarse lo que les echan que ya no piden nada más. Es un círculo vicioso. La solución estaría en ambos lados. Primero, que las productoras y las cadenas diversificaran los temas y los géneros que quieren para sus producciones (y productos como "El ministerio del tiempo" lo atestigüan; deberían haber más intentos en este sentido); y luego que los espectadores, si así lo quieren, diesen una oportunidad a estas producciones.

    Diría que el problema está más del lado de los espectadores que de las cadenas. La cuestión estriba en que hay muchos espectadores a los que ya les gusta dichas series. Un gran porcentaje tienen, por así decirlo, el gusto acostumbrado a las comedias, las tetas y los culos, y no los saques de ahí. Yo no quiero pecar de elitista o algo parecido, pero los espectadores americanos e ingleses están acostumbrados a otro tipo de series o, más bien, a la diversidad de series. Si aquí la concepción de serie que tiene el espectador medio es pasar un rato más o menos entretenido sin darle mucho al coco, pues eso tendremos.

    No sé si me he liado con este comentario. De hecho, no sé si mi opinión es más o menos certera. Pero eso es lo que pienso.

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    1. Buenas Ivan.
      Te has explicado fantásticamente bien y creo que los dos coincidimos. De ahí a que yo me pregunte eso de si tenemos lo que nos merecemos. Tiene que haber de todo y España es un país de comedias, vale, pero también hay gente que quiere hacer otras cosas y público que demandamos otras cosas; incluso otro tipo de comedia donde no estemos siempre a vueltas con chascarrillos sexuales explícitos que, de vez en cuando tienen su gracia, pero que a mi me aburren soberanamente cuando gran parte de las risas que se buscan se hacen con eso.

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